La función cosmética principal de la higienes facial es eliminar por detergencia, emulsificación o por ambos métodos a la vez la suciedad de la superficie cutánea. La piel del rostro acumula una serie de depósitos que es necesario eliminar para mantenerla en buen estado. La suciedad de la piel puede ser de diferente procedencia:
Endógena: Restos de sudor, cebo, células queratinizadas y sustáncias orgánicas.
Exógena: Polvo, restos de crema y maquillaje, etc.
Como una buena parta de estas sustancias son grasas y el agua no es capaz de retirar los restos oleósos, es necesario utilizar unos cosméticos específicos que realicen esta función.
Es muy importante que la aplicación de los productos sea hecha por un profesional competente, con el objetivo de usarlos adecuadamente, según cada tipo de piel, respetando la superficie cutánea y sin alterar el pH, evitando así que se cause irritación o sequedad. Si la limpieza de la piel es muy intensa o se realiza con productos demasiado detergentes, se puede alterar el pH y eliminar el manto hidrolipídico de manera parcial o total, quedando la piel desprotegida y con riesgo de irritaciones o infecciones.
PROCEDIMIENTO
Involucra no sólo aplicaciones cosméticas sino también de aparatología que ayuda a mejorar la piel, la regeneración de colágeno y elastina por acción de las corrientes eléctricas.
El término Acné viene del término AKNE que significa punta. Ésta enfermedad está representada en su forma más frecuente, por el acné vulgar o acné polimorfo juvenil, que afecta en la adolescencia. Según la herencia genética, esta enfermedad puede prolongarse más allá de la pubertad y afecta en mayor grado a los hombres que a las mujeres.
MANIFESTACIONES CUTÁNEAS
Se localizan en las zonas ricas en glándulas sebáceas, en la cara, en la parte de la región mediofacial (zona T) en la parte superior del pecho y de la espalda, con extensión hacia los hombros.
Las lesiones que afectan el folículo polisebáceo son:
La evolución del acné es imprevisible y prolongada y se desarrolla por absesos durante años. Por lo anterior, el tratamiento debe ser constante, periódico y debe ir de la mano de una alimentación balanceada y sana.
TRATAMIENTO
Involucra limpieza de la piel, drenaje linfático manual y limpieza interna (purga), láser, dermoabrasión y un protocolo cosmético con los productos adecuados. Acompañamiento con receta médica
Este tratamiento es adecuado para evitar la excesiva pérdida de agua de nuestra capa córnea (la capa más superficial de la piel) que puede ser debida a agentes externos (rayos UVA, humedad, viento, temperaturas altas y uso excesivo de detergentes) o internos (mala alimentación, beber poca agua, exceso de determinados medicamentos).
Todo eso, determina la aparición de arrugas, falta de elasticidad, envejecimiento prematuro, entre otras. Con este tratamiento se busca reconstruir los lípidos que ayudan a retener esta agua tan importante para mantener nuestra piel en buen estado.
TRATAMIENTO
Se utiliza un protocolo de productos cosméticos para mantener el equilibrio del manto hidrilipídico de la piel con ayuda de aparatología especializada