La desconexión o la ruptura de las fibras de colágeno, así como la malnutrición de las células de la piel, son las causas de la aparición de las lesiones conocidas como estrías.
Los adelgazamientos rápidos y frecuentes así como el proceso de envejecimiento cutáneo, provocan otra alteración muy antiestética y difícil de corregir: la flacidez
Existen diferentes factores para la aparición de estrías:
FACTORES MECÁNICOS. La piel sufre un fuerte estiramiento que supera su límite de elasticidad. Son características de la obesidad y el embarazo.
FACTORES HORMONALES. Se producen por un aumento de las hormonas gluco-corticoides, que participan en la regulación de los niveles de lípidos (grasa) glúcidos y proteínas del organismo. Éstas tienen un origen endógeno y exógeno. El primero se produce durante el embarazo y en alteraciones del equilibrio hormonal, como el síndrome de Couching. Las segundas suelen producirse en tratamientos prolongados con corticoides.
La flacidez es una alteración de los tejidos de la piel caracterizada por la pérdida de tono y elasticidad. Aparece principalmente en rostro, óvalo, cuello, brazos y muslos, unida a una musculatura atrófica. En periodos de lactancia y embarazo también aparecen en las zonas de abdomen y senos.
Los productos reparadores y regeneradores de las células de la piel son muy eficaces en la prevención de la aparición de estrías o de la pérdida de elasticidad de la piel.
Los tratamientos cosméticos pretenden nutrir la piel aumentando la actividad celular e impidiendo la destrucción de las fibras colágenas y elásticas, al mismo tiempo que ayudan a la regeneración del tejido conjuntivo de la zona de aplicación.
El tratamiento de la flacidez requiere la utilización de tratamientos estéticos muy completos y especializados.
Los efectos de la aplicación de estos cosméticos, son el resultado de la combinación de diferentes principios activos que sólo el profesional conoce, y que aumentan la actividad celular y fibrolástica, hidratan, nutren y poseen además un efecto cicatrizante.